Hoy escribe la música

Sentir el ritmo. Escuchar. Escucharnos. Sentir. Sentirnos. Cerrar los ojos y dejarnos llevar.

La música ha servido de inspiración para otras artes, y la literatura no ha sido menos. Que se lo digan a los juglares. O como decía San Agustín "el que canta, ora dos veces".

Hoy nuestros chicos han imaginado lugares y personajes que les han ido sugiriendo los siguientes temas. Tan variopintos como sus creaciones. ¿Es la música una extensión de lo escrito? ¿O es al revés?

VOLVER

Regresó a casa. Cubierto de flores y halagos. Montado en su caballo negro como el azabache. 

Recordaba el sufrimiento y la muerte de las semanas anteriores. Aquel oscuro barrizal lleno de metralla al que nunca volvería. Sus heridas se hacían notar. Cabalgando el Amazonas por aquella explosión de mina en la pierna. Aquel trozo de metralla que eligió clavarse directamente en su frente. Pero él sin embargo nunca llego a dar importancia al sufrimiento y el horror vivido en las trincheras y en los campos de batalla. Prefirió recordar siempre los buenos momentos vividos en la trinchera, las cartas a escondidas a sujetos desconocidos… 

Pero siempre añoró el hogar…

Juan Diego Pérez-Miranda Mata, 2º ESO.

NO QUIERO SER TU AMIGO

La chica terminó de hacer su maleta para salir en 10 minuntos. Al meterla en la furgoneta se le cayó todo y su amigo Marcus la ayudó. De repente sus miradas se cruzaron y resurgió el amor que se había perdido en el verano. Marcus colocó el equipaje en la furgoneta y ayudó a Marisa a subir, cerrando la puerta. Marisa le estaba viendo alejarse por el retrovisor del coche, pensando lo bien que se había portado él y lo mal que ella lo había tratado.

Marcus dio la vuelta, cabizbajo, cuando escuchó que el coche se frenaba. Se abrió la puerta, Marisa salió corriendo y lo abrazó.

Gabriel Quesada Lobo, 1º ESO.

RODEO

Y salté la valla. La adrenalina y la sangre corrían por mis venas con fuerza, haciendo que rebotase en mi cabeza. La sirena comenzó a sonar a mis espaldas. Nada importaba ya. Después, después de 30 años encarcelado, era libre. Podía respirar el aire. Podía correr. Podía gritar. Las graves pisadas de los policías me perseguían. Nada importaba.

Diego R. Atienza, 4º ESO.

LA BÚSQUEDA

Una chica vivía con una familia adoptada y una vez se escapó a buscar a su familia biológica. Montando en su caballo, Nieves cabalgó día  y noche con esperanza de encontrarla.  Fue de pueblo en pueblo buscando ayuda, de colina en colina, mirando en cada rincón de la ciudad. Encontró a un señor mayor que le dijo que habían muerto porque eran pobres y no tenían comida. Trabajaron toda su vida siendo esclavos y su dueño no les daba nada de alimento. Llorando, se fue a su casa desesperada.

Un día le llegó a ella una carta diciendo que alguien quería encontrase con ella en el parque por la noche. Cuando estaba allí se encontró con una mujer con capucha sentada en un banco.  La mujer le dijo que su padre había fallecido y sus hermanos estaban en diferentes países. Cuando le dijo que ella era su madre casi se desmaya. Feliz por fin, la madre la abrazó y le dijo: Feliz cumpleaños María.

Stanis Yaruchyk, 1º ESO.